La visualización deportiva en época de COVID-19
Ansiedad, incertidumbre, tristeza, enojo, apatía, incluso depresión, son parte de las sensaciones o emociones que debido al confinamiento y restricciones de eventos provocados por el COVID-19 se han observado en deportistas.
Quienes conforman el alto rendimiento, incluso pueden presentar frustración al no poder entrenar y miedo a perder la forma deportiva o estancarse en las marcas y logros obtenidos hasta la fecha.
Es entonces, que la técnica de visualización deportiva cobra importancia para los profesionales que trabajan en la preparación y apoyo de los deportistas como una herramienta que puede minimizar o contrarrestar estos trastornos.
La visualización deportiva utiliza la imaginación para modificar patrones físicos y emocionales con el objetivo de programar mentalmente movimientos y rutinas, ensayar conductas antes de ejecutarlas, como una forma de anticipación psicológica, al imaginar la consecución de metas y familiarización de situaciones de competición.
Con ello, los sentimientos negativos se transforman o canalizan en actividades que fortalecen emociones y replantean metas debido a que muchas competencias y actividades se frustraron, hasta trabajar con el estado emocional y físico simulando mentalmente los entrenos.
En esta época donde predomina el distanciamiento físico, la visualización deportiva complementa el entrenamiento físico ya que las imágenes en la mente crean un efecto similar a la realidad, con lo que se experimentan sensaciones cenestésicas.
Como diría el dramaturgo George Bernard Shaw “La imaginación es el principio de la creación. Tú imaginas lo que deseas, pones voluntad en lo que imaginas y por último creas lo que quieres”, por lo que, poner en práctica esta técnica, repercutirá en beneficios a nivel físico y psicológico, impactando en la autoconfianza, y el control de respuestas emocionales y del cuerpo.
Fuente CDAG
