Parte de lesiones antes de Mugello: Bagnaia en muletas, Marini es duda

MotoGP Mugello: Vuelven Bastianini, Oliveira y Raúl Fernández

Bagnaia aún usa muleta tras su fractura en el tobillo, pero ha sido declarado ‘apto’, mientras que Marini tendrá que pasar revisión tras la Práctica 1. Bastianini, Oliveira y Raúl Fernández también han sido declarados fit.

Si hay algo por lo que se ha caracterizado la primera parte de temporada de MotoGP es por la plaga de lesiones que ha afectado a buena parte de la parrilla en las primeras cinco citas de la temporada.

Desde lesiones graves que han dejado a varios pilotos en el dique seco por varias carreras, como son los casos de Pol Espargaró, Enea Bastianini, Marc Márquez, Miguel Oliveira o Raúl Fernández, hasta lesiones más leves que pueden tener su incidencia este fin de semana en Mugello.

Son los casos de Luca Marini y Pecco Bagnaia, que llegan algo convalecientes de las lesiones que sufrieron hace casi un mes en Le Mans. A Bagnaia le diagnosticaron una fractura parcial del astrágalo derecho días después de su choque con Viñales en Le Mans, ya que durante un entrenamiento posterior con la Panigale en Mugello empezó a notar mucho dolor.

Ayer jueves ha aparecido aún con una muleta que ha capturado el periodista Simon Patterson- y con molestias en el tobillo, aunque parece que no será ningún impedimento para su pilotaje este fin de semana. Ha pasado por el centro médico, donde ha sido declarado ‘apto’. Esto decía sobre su estado físico: «Estoy feliz de estar aquí, he hecho lo que he podido para llegar al máximo posible. No estoy al cien por cien, pero estoy bien. Ya he rodado tres veces en moto, dos aquí y una en otro circuito más pequeño, y duele un poco, pero nada que no se pueda hacer».

«Al final, los movimientos que tengo que hacer, los puedo hacer. Seguramente, en los cambios de dirección me molesta un poco, porque no puedo poner todo el peso en el pie. Pero he visto cuando he rodado aquí que después de dos o tres vueltas, que sólo piensas en eso, se pasa bien».

No parece que esta lesión vaya a frenar al líder del campeonato en su carrera de casa: «No estoy al cien por cien, pero me cuesta más entrenar que pilotar. Después de unos días sin saber que tenía una fractura en el tobillo, estaba entrenando aquí y de repente empecé a notar dolor. Pero nada que hiciera imposible centrarme en el pilotaje, con un poco de concentración. No creo que vaya a afectar mi fin de semana».

Marini llega con más dudas

En peores condiciones ha llegado Luca Marini a la carrera de casa. El piloto del Mooney VR46 se lesionó tras el choque que tuvo con Álex Márquez en Le Mans, cuando trató de evitar una caída y el ilerdense no pudo hacer nada para esquivarle.

Marini sufrió una fractura en la muñeca y dado en el pulgar de ambas manos, algo que le ha hecho llegar entre algodones a Mugello. En teoría su participación no corre riesgo, pero en lugar de recibir el ‘apto’ para todo el fin de semana, los médicos le han emplazado a una nueva revisión de su estado tras la Práctica 1: «He tratado de trabajar en mis lesiones durante las últimas tres semanas para estar aquí en las mejores condiciones posibles, y estoy contento de que ahora la fractura esté bien. He hecho todo lo posible para estar al menos al 80%, para ser competitivo y tratar de conseguir un buen resultado aquí. Me importa, porque es Mugello. Esta mañana me he subido a la moto y he intentado hacer algo con mi fisioterapeuta que me puede permitir utilizar mejor el pulgar, porque ahora mismo no tengo problemas con el hueso, pero sí con el tendón y ligamento», explicaba Marini, que se encuentra peor «cuando tengo que frenar». «Veremos mañana las sensaciones, porque Mugello es un circuito estresante», añadía.

«No he hecho ningún test, he probado en parado esta mañana y me duele un poco la mano cuando tengo que mover los dedos para frenar. Parado no parece que me dé ningún problema, pero el circuito de Mugello es uno de los más complicados físicamente, así que no sé. Mañana veré. Seguro que no será fácil, porque en MotoGP cuando no estás al cien por cien ya estás a una décima, y ahora una décima pueden ser 10 posiciones», remataba el piloto italiano sobre su estado físico.

Bastianini, Oliveira y Fernández, ‘aptos’

Para el que parece que por fin acaba el calvario es para Enea Bastianini, que se ha perdido hasta ahora todas las carreras de la temporada. El piloto oficial de Ducati fue arrollado por la moto de Marini en la Sprint de Portimao y sufrió una fractura de omóplato que le ha dejado fuera de juego durante más de dos meses. De hecho, intentó volver en Jerez, pero tuvo que retirarse del Gran Premio después de los entrenamientos del viernes. Ahora sí llega casi recuperado -«al 90%», dice- y también ha sido declarado ‘apto’ por los médicos.

Otro que pone fin a su calvario particular es Miguel Oliveira, que se ha perdido dos Grandes Premios por dos lesiones diferentes. No pudo estar en Argentina después de que Marc Márquez le tirase en Portimao ni tampoco en Le Mans tras un choque con Quartararo en la carrera de Jerez, que derivó en una fractura en el húmero y una lesión en el labrum del ligamento anterior tras colocarle el hombro, que se le había dislocado en la caída.

El piloto portugués también ha sido declarado ‘apto’ por los servicios médicos del campeonato. No obstante, el estado de Oliveira genera más dudas y ya ha hablado con el equipo que no va a forzar más de la cuenta: «Si no estoy suficientemente cómodo para ser competitivo, tampoco hace falta hacer número en la parrilla. El acuerdo con el equipo fue que viniese al cien por cien, es lo que me han pedido. Incluso por muy doloroso que haya sido no estar en las carreras, este tiempo me ha venido bien, porque sólo me he perdido una carrera, y lo que me han pedido es que si me tengo que tomar más tiempo para recuperarme al cien por cien, tengo esa libertad. Entonces, por muchas ganas que haya de volver, tengo esa tranquilidad. Me lo tomaré con calma y a ver qué sale», decía en DAZN.

En el otro lado del box del RNF Aprilia, Raúl Fernández también vuelve tras su delicada operación de síndrome compartimental. El madrileño se probó sólo siete días después de la operación y sólo dio unas vueltas en Le Mans antes de abandonar el Gran Premio. Ahora, con casi un mes de margen, llega recuperado y también con el ‘apto’ de los médicos.

Fuentetherace.com