El Dopaje Destructivo

En el año 2000, en la edición 42 de la Vuelta a Guatemala, se iniciaron las pruebas reales de doping en el ciclismo de Guatemala, se mandaron a un laboratorio en España, auspiciados por el Comité Olímpico Guatemalteco, obteniendo con ello una garantía absoluta del control antidopaje de las Vueltas a Guatemala, obteniendo con ello la credibilidad absoluta.

           En el año 2000, en la edición 42 de la Vuelta a Guatemala, se iniciaron las pruebas reales de doping en el ciclismo de Guatemala, se mandaron a un laboratorio en España, auspiciados por el Comité Olímpico Guatemalteco, obteniendo con ello una garantía absoluta del control antidopaje de las Vueltas a Guatemala, obteniendo con ello la credibilidad absoluta.

Muchos se resistieron a estos controles, puesto que con ellos más adelante habríamos descubierto que si se usaban substancias prohibidas en el ciclismo, prueba de ello me recuerda claramente del positivo de Abel Jahota en tres oportunidades que le trajo consigo la suspensión de por vida de la práctica del ciclismo, la de Lizandro Ajcu que ganaba una Vuelta y se le descalificó por ello, la perdió en manos de un ciclista Tico, posterior a ello se encontró positivo a Nery Velázquez quien ya era reincidente lo que causó su retiro definitivo de las competencias del ciclismo. Lástima al destructivo dopaje se sacó de la circulación a muy buenos ciclistas, pero se sabe que recurrieron a este mal endémico que está siempre presente en el ciclismo mundial y otros deportes.

            La historia del dopaje a nivel del ciclismo se empieza a conocer con Tom Simpson de Inglaterra en el Tour de Francia de 1967, cuando fallece en una etapa de montaña por razones obvias de dopaje en exceso.

 

          De todos es sabido, que el dopaje se ha usado por mucho tiempo en este deporte, se empezó con simples anfetaminas y llegó al uso de drogas sofisticadas como el Epo o las transfusiones de sangre del mismo atleta, dándole un hematocrito más alto y por ende mayor resistencia al esfuerzo, hecha la ley hecha la trampa, se usaron otros componentes para diluir estas drogas por el caso de Epo se logró detectar los rastros de esta droga en la orina y trajo al suelo por un tiempo el uso de estos componentes.

  Luego vino el caso sonado del Equipo Festina, equipo francés que tuvo que desaparecer por lo mismo, al igual que el equipo Once de España que igualmente desapareció del pelotón de profesionales por lo mismo.

            Lo último en esto es el gran escándalo de los 7 Tours y una medalla de bronce en Juegos Olímpicos de Lance Armstrong,  que pena que un atleta de esta talla haya tenido que confesar el uso de substancias dopantes para conseguir esos triunfos, por ello esto traerá consecuencias muy malas para la práctica del ciclismo ya que se trajo al suelo uno de sus mejores representantes, hoy en día yo recomendaría el NO uso de dopaje en el deporte, hay que insistir en el juego limpio, ya que es la única forma de acabar con esta mala práctica. Lo cierto es que la UCI ha propuesto para las grandes vueltas, menor día de competencia y de menos kilometrajes. Pero en el ciclismo siempre ronda el mercantilismo que busca la publicidad sin pensar en los actores los ciclistas que distan mucho de ser súper hombres, recapacitemos en esto y cambiemos el ciclismo, por lo menos en nuestro país.

 

 

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