El piloto británico Jonathan Rea gana su sexto título mundial SBK en Estoril
El norirlandés Jonathan Rea (Kawasaki) se coronó por sexta temporada consecutiva como campeón del mundo de Superbikes, una hazaña que nadie había conseguido con anterioridad en esta competición.
En la primera carrera del fin de semana en Portugal, le valió un cuarto puesto para sumar un título más a su palmarés.
La prueba la dominó el turco Toprak Razgatlioglu (Yamaha), quien se anotó su segunda victoria de la temporada.
El piloto de Kawasaki se aseguró el Mundial a pesar de salir desde la decimoquinta plaza, en la quinta línea de parrilla, tras haberse caído en la Superpole.
No tardó en recomponerse de ese contratiempo y, pilotando al límite, ya era cuarto al inicio de la segunda vuelta, posición en la que finalizó la prueba en el circuito de Estoril (Portugal) tras haber llegado a ponerse segundo.
La batalla por el título fue descafeinada porque el único que podía arrebatarle la corona a Rea, Scott Redding (Ducati), también se fue al suelo en la clasificación, empezó la carrera desde la cola del grupo y, cuando era duodécimo, un problema de motor le obligó a abandonar.
El español Álvaro Bautista (Honda), que salió octavo, mejoró posiciones en la carrera, pero perdió el control de la moto cuando quedaban tres vueltas para la bandera a cuadros, que pudo cruzar en el decimoséptimo puesto. Xavi Forés (Kawasaki) fue el mejor piloto nacional con un octavo.
En Estoril también se decidió el título en la categoría Supersport 300 en una accidentada carrera que ganó el español Mika Pérez (Kawasaki) y en la que el campeonato quedó en manos del neerlandés Jeffrey Buis (Kawasaki), sexto en la penúltima carrera del año.
Además, en Supersport, el ya campeón del mundo Andrea Locatelli (Yamaha), logró la duodécima victoria del año. Hubo bandera roja y la prueba se reinició a doce vueltas con el español Isaac Viñales (Yamaha), cuarto.
Fuentelanuevaespaña